Credito ilusion caja laboral

documental de la cooperativa mondragón

La actual Laboral Kutxa es el resultado de la fusión, formalizada en 2012, entre las antiguas Caja Laboral e Ipar Kutxa, ambas cooperativas de crédito. Como parte de la Corporación Mondragón, su objetivo es “transformar la empresa para transformar la sociedad”, construyendo una sociedad más justa y humana, sobre la base de unas relaciones internas de la empresa por las que se sustituyen las reglas de decisión basadas en el capital por criterios como la capacidad de dirigir las decisiones, y la propiedad en manos de los trabajadores.

Para apoyar el desarrollo del autoempleo, principalmente entre los jóvenes, Laboral Kutxa trabaja a través de la Fundación Gaztempresa, creada en septiembre de 2002. Su cartera de servicios incluye asesoramiento, formación y apoyo en el momento inicial de la puesta en marcha de la iniciativa, y en momentos posteriores para su consolidación.

mondragón industrial

LABORAL Kutxa es un Banco Cooperativo, guiado por unos valores y una filosofía que les lleva a apostar por el interés común y no por el individual, a tomar decisiones democráticas y responsables y a reinvertir sus beneficios en la sociedad. Representan una forma diferente de hacer banca, basada en la cooperación y el compromiso con la sociedad. Su principal objetivo es la satisfacción de sus clientes y la generación de riqueza y empleo en el entorno. Están ubicados básicamente en el País Vasco (Norte de España), con un total de 304 oficinas.

Distribuir parte de los beneficios a programas a favor del progreso colectivo y del medio ambiente es su esencia, con acciones que generan actividad económica y empleo. Por ello, mantienen un fuerte arraigo a los entornos donde desarrollan su actividad, apoyando proyectos que van desde el empleo y la cultura, la formación y el conocimiento, la sostenibilidad y el medio ambiente hasta la acción social.

LABORAL Kutxa quiere que la sociedad progrese. Apoyan la educación, la innovación y la economía social. También apuestan por el emprendimiento y ayudan en su crecimiento a negocios y empresas. Apuestan por un futuro que crean entre todos y para toda la sociedad.

corporación mondragón

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Caja Laboral Popular Cooperativa de Crédito o Caja Laboral fue una cooperativa de crédito española establecida en 1959 como parte de la Corporación Mondragón y con sede en Mondragón, en el País Vasco de España.[1] El principal proveedor financiero detrás del movimiento cooperativo vasco, Caja Laboral cubre el segmento financiero de Mondragón y proporciona servicios bancarios y financieros a sus clientes a través de una red de más de 370 sucursales en el País Vasco y más allá. Con más de 1.800 empleados -que son en realidad los socios-propietarios de la entidad siguiendo la filosofía cooperativa de propiedad y administración compartidas- Caja Laboral genera unos ingresos anuales superiores a los 330 millones de euros.

Junto con su compañía hermana de seguros sociales Lagun Aro, Caja Laboral encabezó el Grupo Financiero de la Corporación Mondragón, que según fuentes de la empresa “opera de forma autónoma en el marco de una única estrategia conjunta”. Fue la primera entidad financiera española en abrir sus sucursales a última hora de la tarde y a primera hora de la noche[cita requerida].

grandes cooperativas de trabajo asociado

Un objetivo primordial para el desarrollo económico regional es ampliar el empleo de la población local de forma permanente y a largo plazo, ayudándoles a crear sus propias pequeñas empresas y creando mercados locales para los bienes y servicios producidos localmente.

Esta propuesta puede defenderse de varias maneras. La primera es que el 90% del nuevo empleo del país lo generan las pequeñas empresas con activos inferiores a 300.000 dólares. Otro factor es la naturaleza voluble de las grandes corporaciones, que tienen el poder de instalar una industria en una región, contratar a varios cientos de personas y luego, unos años más tarde, cerrar la industria o trasladarla a otro lugar, probablemente a un país del Tercer Mundo, donde los salarios más bajos u otras condiciones permiten obtener mayores beneficios. Cientos de pequeñas ciudades de todo el país han sido sometidas a esta situación, especialmente en los últimos diez o quince años. Cada vez más regiones, especialmente en el noreste, han aprendido a desconfiar de estas situaciones. Por ello, buscan soluciones alternativas al desarrollo económico.

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