▷ Invertir en startups españa | Actualizado octubre 2024

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Las inversiones en startups catalanas en 2019 se han centrado principalmente en tecnologías TIC (21%), Big Data (16%) y Cloud Computing (13%). Además, el 20% de las startups catalanas han levantado rondas de inversión con cifras superiores al millón de euros.

Entre las principales inversiones en startups de los últimos tres años destacan Letgo, Glovo, TravelPerk, Red Points, ID Finance, Typeform, Nice Fruit, Minoryx, Badi e ISalud, entre otras. Puedes acceder a la información de todos los acuerdos aquí.

De 2017 a 2019, los sectores con más exits de startups han sido TIC & Telecom, y Contenidos Digitales y Medios de Comunicación. Los principales exits de startups han sido Cornerjob, Visyon, Bankimia, Zhilabs, Captio, Promofama o Knok. Accede a más información sobre las salidas de startups catalanas aquí.

El talento es nuestro mayor activo. Estamos contratando mucho talento senior en Barcelona y no podría estar más orgulloso de cómo está evolucionando el ecosistema tecnológico aquí. Es una gran ciudad no sólo para vivir, sino también para trabajar y poner en marcha tu negocio.

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España se está preparando para impulsar una legislación favorable a las startups, tras haber presentado recientemente un gran y audaz plan de transformación con el objetivo principal, para 2030, de convertir el país en la “Spain Entrepreneurial Nation”, como dice la traducción ligeramente torpe en inglés.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, subió al escenario de la Web Summit en diciembre para anunciar la introducción de la próxima Ley de Startups y para anunciar un nuevo cargo, un alto comisionado, encargado de llevar a cabo una transformación económica empresarial a nivel nacional trabajando con todos los ministerios relevantes.

Los objetivos generales de la estrategia son aumentar el crecimiento de las inversiones en startups; atraer y retener el talento; promover la escalabilidad; e inyectar la innovación en el sector público para que pueda reforzar y apoyar el desarrollo digital de España.

La mencionada Ley de Startups es la primera legislación dedicada al sector, y pretende simplificar la creación de empresas en España, además de introducir ventajas fiscales e incentivos para las inversiones extranjeras. Será, por tanto, un hito.

tipo de organización de crowdfunding

El espectacular nivel de actividad visto en la inversión en etapas tempranas ha continuado en 2021, pero este año también hemos registrado rondas en etapas posteriores de tamaños muy grandes junto con volúmenes de inversión récord. Hay un nuevo unicornio, y también una cohorte considerable y creciente de scaleups que se están convirtiendo en líderes en nuestro país y a nivel internacional.

Con aproximadamente 7.150 startups activas en 2020 -según estimaciones conservadoras-, este número prácticamente se ha duplicado en sólo un año. Junto con las extraordinarias cifras de inversión, el ecosistema de emprendimiento tecnológico sigue acelerando su crecimiento y afianzando su lugar entre los más importantes de Europa. El ecosistema no se limita a Barcelona y Madrid, dos hubs que se sitúan entre los 6 primeros de Europa; ciudades como Valencia, Bilbao o Málaga también cuentan con florecientes ecosistemas. Los sectores con mayor actividad de inversión en startups el año pasado fueron movilidad/logística, salud y bienestar, fintech/insurtech, productividad-empresa, turismo, comercio electrónico, software y ciberseguridad. En los últimos cuatro años, más del 50-60% de la financiación de las startups procede de inversores de fuera de España, lo que pone de manifiesto el atractivo del ecosistema emprendedor de nuestro país para el capital extranjero.

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El Consejo de Ministros ha anunciado hoy la adopción del proyecto de texto que, según ha dicho, contiene importantes medidas para reducir los trámites y eliminar los obstáculos burocráticos para fundar e invertir en startups en España.

Otras medidas fiscales destacables son la reducción del Impuesto de Sociedades y del Impuesto sobre la Renta de No Residentes (que pasa del 25% al 15%) durante cuatro años, lo que pretende eliminar un importante obstáculo, dado que las startups no suelen estar centradas en la obtención de ingresos en sus primeros años (y, sin embargo, según la normativa actual, deben pagar el mismo tipo impositivo que las empresas más establecidas).

También se eleva el importe máximo deducible para las inversiones en empresas nuevas o de reciente creación (de 60.000 a 100.000 euros anuales), mientras que el tipo de deducción pasa del 30% al 50% y se amplía el plazo para considerar a una empresa “de reciente creación”, según el proyecto aprobado por los ministros.

La reforma también parece destinada a resolver otra de las principales quejas de los fundadores locales: El coste y la burocracia de crear una startup en España, que ha llevado a algunos fundadores a establecer su negocio en otro lugar de Europa, aunque luego construyan su producto desde oficinas en el país.