Biografia de virginia woolf
F. scott fitzgerald
(1882-1941) Escritor británico. Virginia Woolf se convirtió en una de las figuras literarias más destacadas de principios del siglo XX, con novelas como La señora Dalloway (1925), La habitación de Jacob (1922), Al faro (1927) y Las olas (1931).
Virginia Woolf nació como Adeline Virginia Stephen el 25 de enero de 1882 en Londres. Woolf fue educada en casa por su padre, Sir Leslie Stephen, autor del Dictionary of English Biography, y leyó mucho. Su madre, Julia Duckworth Stephen, era enfermera y publicó un libro sobre la enfermería. Su madre murió en 1895, lo que fue el catalizador de la primera crisis mental de Virginia. La hermana de Virginia, Stella, murió en 1897, y su padre murió en 1904.
Woolf aprendió pronto que su destino era ser “hija de hombres educados”. En una entrada de su diario, poco después de la muerte de su padre en 1904, escribió: “Su vida habría acabado con la mía… Sin escribir, sin libros; – inconcebible”. Por suerte, para el mundo literario, la convicción de Woolf se vería superada por su prurito de escribir.
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Para la biógrafa Gillian Gill, es importante señalar otra parte de la historia de Virginia Woolf: su experiencia de abuso sexual durante su infancia y su juventud. En su reciente libro Virginia Woolf and the Women Who Shaped Her World (Virginia Woolf y las mujeres que formaron su mundo), Gill destaca la identidad de Woolf no sólo como titán de la literatura y mujer formada por sus relaciones femeninas, sino también como superviviente de un abuso traumático a manos de sus hermanastros y más tarde -no por casualidad- como defensora de la protección de los niños vulnerables a experiencias similares. “Este [el abuso sexual] es un tema de enorme controversia en la literatura de Virginia Woolf”, dice Gill. “Según su propio relato, tuvo un efecto de por vida en ella y lo vemos cuando tiene 40 años y escribe sobre ello en sus memorias en 1939”.
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“Dios mío, ¿cómo se escribe una biografía? “1 La pregunta de Virginia Woolf persigue a sus propios biógrafos. ¿Cómo empiezan? “Virginia Woolf fue una señorita Stephen”.2 “Virginia Woolf fue una niña que sufrió abusos sexuales: fue una superviviente de incesto”.3
Las diferentes aperturas sugieren algunas de las opciones para los biógrafos de Virginia Woolf. Pueden empezar en el origen, con su historia familiar, y verla en el contexto de la ascendencia, el país, la clase. Pueden empezar por Bloomsbury, fijándola en su grupo social e intelectual y en su reputación.
grupo social e intelectual y su reputación. Pueden empezar pensando en ella como una víctima, como alguien que va a suicidarse. Pueden empezar con una teoría o una creencia y verla siempre en términos de ella, ya que, como Shakespeare,
es una escritora que se presta a infinitas interpretaciones. Lo que ya no parece posible es empezar: “Adeline Virginia Stephen nació el 25 de enero de 1882, hija de Sir Leslie Stephen, editor del Dictionary
No existe una biografía objetiva, y menos en este caso. Se han tomado posiciones, se han creado mitos. Me he dado cuenta de que en el transcurso de cualquier conversación sobre este libro me preguntarían, sin falta, una o varias de las
George eliot
Virginia Woolf fue tachada durante mucho tiempo de “modernista menor”, pero ahora se erige como uno de los gigantes de la literatura del siglo XX. Su biógrafa, Hermione Lee, nos habla de los mejores libros, novelas y ensayos y diarios de Virginia Woolf.
Antes de llegar a los libros, vamos a empezar esta discusión con su biografía de Virginia Woolf. En ella menciona que, cuando estudiaba literatura inglesa en la Universidad de Oxford, no se impartían clases sobre Woolf, y que, como estudiante de posgrado, le dijeron que Woolf era una “modernista menor”, que no se podía clasificar con gente como James Joyce, T. S. Eliot o D. H. Lawrence. ¿Por qué ha cambiado tanto desde entonces?
Trabajé en una biografía de Virginia Woolf a principios de la década de 1990, y tuve la gran suerte de que muchas cosas para entonces estaban impresas y eran accesibles. También pude ir a la colección Berg de la Biblioteca Pública de Nueva York y leer los diarios -de hecho, tuve los diarios en la mano-, cosa que ya no se permite hacer. Escribí siguiendo la estela de un montón de versiones diferentes de ella a lo largo de los años 60, 70 y 80. Creo que toda biografía es reactiva: escribes a la luz de lo que hay. Además de su adopción como feminista -lo cual es, por supuesto, absolutamente correcto, y una forma tremendamente creativa de pensar en ella-, también había sido adoptada en los años 80 por un movimiento psicoanalítico que se concentraba en lo que le había ocurrido a la gente en su infancia. Hubo una linea de acercamiento a Virginia Woolf alrededor de temas de abuso sexual en la infancia, alrededor de temas del tratamiento de la locura en su vida. Se pensaba en ella como una víctima o como una inválida, alguien que sufría actitudes hacia la enfermedad mental, cautiva de la claustrofobia de la vida familiar de finales de la época victoriana. Yo reaccionaba contra eso, porque no quería verla como una víctima. Quería verla como una escritora profesional fuerte, prolífica, enérgica y con conciencia política.
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