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Musica instrumental para trabajar
2:03:59canciones pop instrumentales 2020 | música de estudio (2 horas)mood melodiesyoutube – 12 oct 2020
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Un instrumental es una grabación normalmente sin voces, aunque puede incluir algunas voces inarticuladas, como los coros gritados en un entorno de big band. Por ampliación semántica, un sentido más amplio de la palabra canción puede referirse a los instrumentales[1][2][3] La música se produce principal o exclusivamente con instrumentos musicales. Un instrumental puede existir en la notación musical, después de ser escrito por un compositor; en la mente del compositor (especialmente en los casos en los que el propio compositor interpretará la pieza, como en el caso de un guitarrista solista de blues o un violinista de música folk); como una pieza que es interpretada en vivo por un solo instrumentista o un conjunto musical, que podría variar en componentes desde un dúo o trío hasta una gran big band, banda de concierto u orquesta.
10:00:01música de ritmo 10 horasrelax cafe musicyoutube – 1 feb 2018
La música se ha vuelto mucho más accesible para el público en las últimas décadas. Uno de los factores que ha influido es la creciente disponibilidad de la música: mientras que antes se necesitaban CD o cintas y un reproductor acorde, hoy en día la música puede reproducirse digitalmente en muchos dispositivos diferentes, como ordenadores, teléfonos móviles o iPods. Además, la oferta de canciones disponibles es casi infinita gracias a los portales de música. Esto permite seleccionar canciones adecuadas para diferentes situaciones, como canciones relajantes para una velada acogedora o canciones activadoras antes de salir. Debido a estos avances en la tecnología musical, el aprendizaje con música de fondo ha recibido cada vez más atención en la última década (por ejemplo, Schwartz et al., 2017).
Para algunas situaciones parece intuitivo pensar que la música ayudaría a mejorar nuestra experiencia, pero ¿cómo encajan la música y el aprendizaje? En la actualidad, los efectos de la música de fondo mientras se aprende y los mecanismos que hay detrás no están claros. Por un lado, la música parece tener un efecto positivo (efecto Mozart; Rauscher et al., 1993) y estimulante (hipótesis del estado de ánimo; Husain et al., 2002), que podría mejorar el aprendizaje. Por otro lado, la música de fondo podría suponer una carga adicional para la memoria de trabajo (efecto de detalle seductor; por ejemplo, Rey, 2012), lo que dificultaría el aprendizaje. Para poder lidiar simultáneamente con el material de aprendizaje y la música de fondo, la capacidad de la memoria de trabajo del alumno es un factor crucial a tener en cuenta.
El sabor de la miel
Probablemente haya oído que la música clásica es buena para estudiar, hacer exámenes y realizar trabajos creativos. Esta idea tiene su origen en el “efecto Mozart”, un término acuñado en 1993 cuando los científicos descubrieron que escuchar la Sonata de Mozart durante 10 minutos mejoraba la capacidad de razonamiento espacial, un tipo concreto de inteligencia que implica visualizar y manipular imágenes en el cerebro. Sin embargo, los resultados de ese estudio de 1993 se exageraron y la música clásica se convirtió en sinónimo de inteligencia: tan sinónimo, de hecho, que en 1998 el entonces gobernador de Georgia, Zell Miller, propuso enviar una cinta de cassette de música clásica a todos los bebés nacidos en el estado, de forma gratuita, para que se volvieran inteligentes. Aunque el Efecto Mozart ha quedado más o menos desacreditado desde entonces, algunos expertos siguen sosteniendo que la música puede ofrecer otros beneficios a nuestro cerebro: concentración y productividad. Más información: Cómo crear la mejor lista de reproducción para hacer ejercicio
¿Cómo puede la música ayudarnos a concentrarnos? Considere estas razones por las que la música puede ayudarle a avanzar en su lista de tareas: Provoca emociones positivas: Las personas tienden a ser más productivas y eficientes cuando están contentas (investigaciones recientes lo confirman), y el tipo de música adecuado puede animarte. De hecho, las personas que escuchan música son más felices que las que no la escuchan: A veces, el trabajo y la vida son monótonos. Si te sientes aburrido, una melodía alegre puede hacer que las tareas aburridas parezcan más atractivas. Ahoga otros ruidos: Si alguna vez has trabajado en una cafetería o en una oficina de planta abierta, probablemente te hayan puesto los pelos de punta los sonidos de alguien que se moquea o arrastra los pies. Escuchar música, sobre todo a través de unos buenos auriculares, puede ahogar los ruidos que distraen: La mejor música en streaming: Spotify, Apple Music y más, comparado Si no soportas los sonidos de tu entorno de trabajo, utiliza la música para ahogarlos.
Estudio
Para mí, escuchar música mientras trabajo es el secreto de mi productividad. Basta con la canción de Beyoncé adecuada para que pase de la inactividad a la productividad. (En serio, funciona de maravilla).
El problema es que encontrar la lista de reproducción perfecta no siempre es fácil. Con un sinfín de posibilidades de música en streaming al alcance de mi mano, puede ser difícil dar con las canciones adecuadas para poner en marcha la maquinaria. Así que hice lo que mejor sabemos hacer aquí: un poco de investigación.
Para ayudarte a encontrar la mezcla perfecta, hemos seleccionado y recopilado siete listas de reproducción de Spotify diseñadas para estudios específicos. Tanto si te gusta Mozart como Chance The Rapper, estamos seguros de que hay algo en esta lista que te servirá.
Uno de los estudios más citados en relación con la música y la productividad es el “Efecto Mozart”, que concluyó que escuchar a Mozart incluso durante un breve periodo de tiempo cada día puede aumentar la “capacidad de razonamiento abstracto”.
El estudio -dirigido por los investigadores Gordon Shaw, Frances Rauscher y Katherine Ky- empleó a 36 estudiantes de Cal-Irvine que fueron divididos en tres grupos. El grupo uno escuchó una selección de Mozart, mientras que el grupo dos escuchó una cinta de relajación, y el grupo tres soportó 10 minutos de silencio.
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Bienvenid@, soy Patricia Gómez y te invito a leer mi blog de interés.