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El uso de máscaras en los teatros se remonta a las antiguas fiestas griegas en honor a Dionisio, dios del teatro. Cuando los romanos conquistaron el sur de Europa, adaptaron la afición griega por el teatro y el uso de máscaras en obras y celebraciones. El Carnaval de Venecia (o Carnevale), que se remonta al siglo XV, sigue siendo famoso hoy en día y atrae a turistas de todo el mundo por el colorido y la emoción de esta antigua tradición.
La fabricación y el uso de máscaras italianas se extendió tanto que, desde el siglo XV, los fabricantes de máscaras tienen su propio estatus de artesanos oficiales en Italia. Hoy en día, nuestros artesanos siguen haciendo sus máscaras completamente a mano, desde el principio del proceso hasta el final.
En primer lugar, se crea un molde de arcilla en el que se vierte yeso líquido. Cuando esta capa de yeso está completamente endurecida, se retira el molde de arcilla original. El molde de escayola (negativo) se cubre con una fina capa de vaselina y luego se rellena con varias capas de papel húmedo y pegamento. Se tiene mucho cuidado de presionar el papel en el molde sin que se arrugue ni se doble. Después, el molde se coloca sobre una fuente de calor hasta que la máscara esté seca y pueda extraerse. Entonces se aplican varias capas de témpera blanca y se pueden recortar los agujeros para los ojos. Ahora la máscara está lista para ser decorada con diferentes tipos de materiales. Las máscaras se decoran con colores vivos, pan de oro y plata, plumas, telas, macramé, cristal de Swarovski y cuero.
Máscara de bauta
El Carnaval de Venecia está actualmente en pleno apogeo, y su punto culminante seguro que son los increíbles trajes y máscaras. Incluso hoy en día, la centenaria tradición del carnaval veneciano sigue conservando algo de mágico y misterioso, y eso se debe precisamente a las máscaras típicas.
El Carnaval de Venecia se remonta al menos al año 1094, cuando se menciona por primera vez. Era esa época del año en la que la gente tenía la oportunidad de ocultar su identidad, sexo y clase social. Las máscaras permitían a todos, hombres y mujeres, ser y actuar como quisieran, transgredir si lo deseaban. Era un acontecimiento social que la República de Venecia, normalmente muy estricta, permitía hábilmente porque para dar a la gente, y especialmente a las clases sociales más humildes, un periodo para dedicarse por completo a la fiesta y la diversión, a la música y al baile. Un periodo despreocupado en el que olvidarse de los deberes de la vida cotidiana, estar libre de prejuicios y juicios. Se dice que incluso los sacerdotes y las monjas aprovechaban el acontecimiento para realizar escapadas amorosas…
En la época del Carnaval, al pasear por las calles de Venecia, era habitual escuchar “¡Buongiorno Siora Maschera! Las máscaras eran tan populares y queridas que los fabricantes de máscaras, llamados “mascareri”, tenían incluso un estatuto. Pertenecían al mismo grupo de trabajo que los pintores, y contaban con la ayuda de los “targheri”, que imprimían rostros pintados en el estuco, a veces con rasgos ridículos y exagerados.
Pantalone
La máscara de carnaval veneciana La historia se pierde en el laberinto del tiempo, en un encantador relato en el que los hechos históricos reales se difuminan con una mezcla de tradición y folclore. Entonces, ¿qué es la máscara de carnaval? Desde el comienzo de las celebraciones, los disfraces de Carnaval de Venecia y, en particular, las máscaras han sido el alma misma del Carnaval, una forma de divertirse y entretenerse en el más absoluto anonimato: Los significados de las máscaras del Carnaval de Venecia conservan numerosos ejemplos, desde las famosas mascaradas del Carnaval de Venecia, que suponían uno de los momentos más singulares de toda la celebración del Carnaval, hasta la estrecha relación entre la commedia dell’arte y el Carnaval, que comenzó casi por accidente y se convirtió en uno de los tipos de representación teatral más interesantes.
Susurrado entre las estrechas calles del casco antiguo o gritado desde las ventanas de los majestuosos palacios, “Buenos días Máscara Siora” era el saludo habitual de los venecianos durante el periodo de Carnaval, cuando la identidad personal, el género y la clase social desaparecían mágicamente bajo el hechizo de las hermosas máscaras del Carnaval de Venecia.
El vagabundo (resina completa)
“Máscara muy hermosa, que combina la alta calidad de sus materiales así como su detallado trabajo artesanal. Cara de cerámica hecha a mano, cuero de calidad para el entorno y magnífica pintura a mano con colores vivos. Comprado en la tienda de Venecia, pero exactamente el mismo producto visualizado en la foto”.
“Una hermosa pieza que estoy encantado de añadir un lugar especial en mi colección. La atención al detalle y la calidad superaron mis expectativas. El servicio fue cálido y atento. La entrega fue rápida y puntual hasta Montreal, Canadá. Muy recomendable”
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Bienvenid@, soy Patricia Gómez y te invito a leer mi blog de interés.